Veracruz
28.05.2013 04:57
El primer municipio fundado por los conquistadores españoles en el Nuevo Mundo fue precisamente Veracruz. Todo empezó en abril de 1518, cuando Juan de Grijalva desembarcó en un islote cercano a la costa, al cual se le llamó San Juan de
Pero fue hasta el año siguiente, el 22 de abril de 1519, cuando Hernán Cortés desembarcó en tierra firme, en la playa de Chalchihuecan, lugar en el que decidió fundar una población y formar el primer Ayuntamiento de México. Ese día era Viernes Santo, el día de la Semana Santa conocido como la Vera Cruz, es decir, Verdadera Cruz, por lo que le dio el nombre de la Villa Rica de la Vera Cruz.
Fue en agosto de 1519 cuando Cortés inició su marcha de conquista desde ahí hacia México Tenochtitlán, mientras que sus capitanes se encargaban de pacificar algunas regiones que hoy comprenden la entidad veracruzana.
Así como Veracruz fue la puerta de entrada de los conquistadores, se convirtió en el principal puerto de comunicación entre España y la Nueva España, desde donde se despachaban para Europa, guajolotes, maíz, frijol, aguacate y algodón, entre otros, además de que se recibían productos como: haba, arvejón, trigo, arroz, etc., así como animales domésticos, pólvora, telas, vinos y múltiples mercaderías distribuidas posteriormente por el territorio novohispano.
Unos años más tarde, en 1550, se inició aquí la extracción de oro y plata a gran escala, y fue tan abundante que, para finales del siglo XVI, representaba el 80% de las riquezas exportadas. En consecuencia el puerto prosperó vertiginosamente, sólo que este auge no pasó inadvertido a los corsarios británicos y holandeses, quienes dirigieron sus miradas -y sus asaltos- en esa dirección, victimando al puerto en varias ocasiones. Aquí cabe el comentario de que los famosos Francis Drake y John Hawkins figuraron entre sus agresores.
Por consiguiente, las autoridades coloniales decidieron tomar cartas en el asunto y, en 1663, dieron inicio a la construcción del fuerte de la isla de San Juan de Ulúa, proyecto que se continúo ampliando hasta su conclusión en 1746, cuando ya era una considerable muralla con siete Baluartes: Santiago o El Polvorín, San José, Santa Bárbara, San Javier, San Mateo, San Juan y el de La Concepción. Esta fortaleza fue derribada en 1889 y hoy únicamente se conserva el baluarte de Santiago.
Una vez que fue protegido, continuó el desarrollo del puerto más importante de la Nueva España. Por ende, la ciudad fue cuna de una rica burguesía comercial y llegó a ser, para 1778, más próspera que la propia ciudad de México, para la cual Veracruz consistía igualmente un punto clave en su desarrollo. En la época que dieron inicio los ataques al puerto se desencadenó una inestabilidad económica y social en todo el territorio del estado, por lo que se incrementaron considerablemente los asaltos y robos a poblados y diligencias. Esto motivó que, en 1618, se fundara la Villa de Córdoba, en un punto estratégico de la ruta de la Ciudad de México a Orizaba y Veracruz, con la intención de brindar protección a los vecinos y a los viajeros que la utilizaban.
En el año de 1739 se erigió un importante ayuntamiento sobre un asentamiento prehispánico, al cual se le llamó Xalapa, que significa "en arenales". Para 1791, el rey Carlos IV le concedió escudo y título de villa a esta hermosa ciudad que se convertiría en la capital veracruzana. Fue en 1786 cuando el territorio del estado recibió por primera vez el nombre de Veracruz, aunque tuvo que esperar un poco más, hasta 1824, para que se asentara en la Constitución del México Independiente el nombre de: Estado Libre y Soberano de Veracruz.
La población de Veracruz resultó muy sensible a la ideología liberal y republicana, por lo que fue uno de los focos del movimiento independentista mexicano, desempeñando un valioso papel cuando varios grupos de veracruzanos se sublevaron y enfrentaron a las fuerzas provenientes de España, para evitar así que reforzaran a los contingentes del centro del país.
La insurrección creció con el tiempo en el estado, donde notables caudillos lucharon por la independencia, como Morelos, que se batió en Monte Grande, El Ingenio, Acutzingo y el Cerro del Borrego hasta tomar Orizaba el 29 de octubre de 1812, acciones en la que participaron los hermanos Galeana y Vicente Guerrero. Nicolás Bravo luchó en Alvarado, Puente Nacional, Coscomatepec, Córdoba y el Palmar, y el heroico cura Matamoros en los límites de Veracruz con Puebla en 1812.
Otras luchas importantes fueron las de Manuel de Mier y Terán en Huatusco y Playa Vicente, López Rayón en Omealca, Bárcena en Córdoba y Guadalupe Victoria en Puente Nacional, Nautla, Huatusco y Naolinco. El teniente coronel Antonio López de Santa Anna salió de Veracruz con su batallón y expulsó a los insurgentes de Orizaba, pero el 29 de marzo de 1821 se subordinó al comandante José Joaquín de Herrera, pronunciándose por el Ejercito Trigarante, y en mayo combatió a Francisco Hevia, que atacaba Córdoba, donde pereció este jefe realista.
Así, Juan de O'Donoju, el último virrey, viajó a Veracruz y firmó los Tratados de Córdoba con Agustín de Iturbide el 23 y 24 de agosto de 1821, con lo que se proclamó la Independencia de México, que se constituyó en nación libre y soberana.
poco después el Puerto de Veracruz se ganó por primera vez el título de "heroico", por haber resistido valientemente, durante 26 meses, el pernicioso bombardeo del regimiento español emplazado en San Juan de Ulúa, del 25 de septiembre de 1823 al 18 de noviembre de 1825. Éstos fueron los últimos combates contra las huestes españolas, hasta que los últimos contingentes partieron hacia España.
El 28 de noviembre de 1838, el Puerto de Veracruz fue víctima de un ataque lanzado por la armada francesa, bajo las órdenes del contralmirante Carlos Baudín, en lo que se llamó la "Guerra de los Pasteles". La ciudad hizo frente al ataque con dignidad y valentía, lo cual le valió el segundo título de "heroica"
Años más tarde, el 22 de marzo de 1847, el puerto recibió una nueva embestida, en esta ocasión de la escuadra norteamericana al mando del general Winfield Scott. Una vez más la ofensiva fue soportada estoicamente por toda la población, aunque la superioridad bélica del invasor terminó por imponerse sobre la maltrecha guarnición que defendía la ciudad, a la que esta acción le valió su tercer título de "heroica".
Poco después estalló la sangrienta Guerra de Reforma, en la que Veracruz tuvo un papel protagónico, ya que fue donde Benito Juárez, bajo la protección del entonces gobernador Manuel Gutiérrez Zamora, estableció la capital de la República y promulgó "Las Leyes de Reforma", en 1860.
El general Ignacio de la Llave, quien fuera gobernador del estado de 1857 a 1860, combatió heroicamente en la lucha contra los franceses y, a raíz de su muerte, se publicó un decreto el 10 de julio de 1863, el cual estableció que, en lo sucesivo, al estado se le conocería como: Estado Libre y Soberano de Veracruz-Llave.
El 28 de mayo de 1864 Veracruz fue testigo del arribo de Maximiliano de Habsburgo para imponer la monarquía en México, lo cual obligó al gobierno juarista a peregrinar por el interior. La República se restableció con el triunfo de las armas republicanas en Querétaro, en junio de 1867.
En el último tercio del siglo XIX tuvieron lugar varios brotes de rebeldía: en 1879 se sublevó la tripulación del barco cañonero "Libertad" en el puerto de Tlacotalpan, rebelión que fue severamente reprimida por instrucciones del presidente Porfirio Díaz. Más tarde, en 1896, se desató una revuelta indígena, que fue aplacada mediante la matanza de 6 mil de personas.
El Estado de Veracruz se vio beneficiado en muchos aspectos durante el porfiriato: se modernizó el puerto, se introdujo la electricidad, se edificaron modernas construcciones para la época y crecieron la economía y el comercio, sin embargo se cometió el error de no llevar bienestar a las clases más necesitadas, lo que trajo como consecuencia que, durante la Revolución Mexicana, Francisco I. Madero recibiera el apoyo decidido de los veracruzanos en su lucha por derrocar a Porfirio Díaz, quien abandonó el país en 1911, saliendo del puerto de Veracruz con rumbo a Francia.
Los días 21 y 22 de abril de 1914, todavía en tiempos de la revolución, el Puerto de Veracruz sufrió una nueva invasión norteamericana, la cual se topó con grupos de civiles voluntarios y cadetes de la escuela naval militar que defendieron con valentía la integridad de nuestro nación, dando una lección de heroísmo a las tropas enemigas. Con este enfrentamiento, el Puerto de Veracruz consiguió su cuarto y último -hasta el día de hoy- título de "heroico", por lo que actualmente se le conoce como una ciudad "cuatro veces heroica".
Fue en noviembre de ese mismo año, 1914, y hasta octubre de 1915 cuando Veracruz fue una vez más capital de la República, durante el gobierno de Venustiano Carranza, y fue aquí donde se promulgaron las "leyes agrarias" y las del "municipio libre", entre otras.
En el año de 1937 Veracruz volvió a protagonizar un movimiento de relevancia nacional, cuando un grupo de trabajadores petroleros del estado inició una huelga, que fue el principio de una serie de conflictos laborales que a la postre desembocaron en la Expropiación Petrolera de 1938.
Desde entonces, Veracruz Llave ha conseguido un desarrollo económico considerable y una cohesión social firme.